LLUÍS VIDAL
Nacido en
Barcelona de familia de músicos, su infancia transcurre sin embargo con
normalidad.
Comienza a
estudiar música a los diez meses de edad en la Escuela Experimental del Padre
Carne, iniciativa del Ayuntamiento de Barcelona destinada a incitar a los bebés
al conocimiento prematuro de la música. Al cabo de tres meses ya es capaz de
tararear, mientras da palmas con las manitas, los Cuatro Últimos Lieds de
Strauss. A los dos años toca perfectamente el piano con una mano y a los cuatro
con las dos. A los cinco años se presenta al concurso infantil de piano de la
Escuela Canigó y lo gana. A los siete años es escogido, junto con Claudi
Arimany, para representar a España en el Certamen Mundial de Músicos de
Corta Edad en Copenhagen. A los
catorce años huye de la casa paterna y es encontrado un año más tarde viviendo
en una comuna en Blanes en compañía de cuatro prostitutas.
Termina así una
infancia agitada que dejará sus huellas en el joven Vidal. Decide entonces
abandonar completamente la música y trabaja de dependiente en El Corte Inglés
en la sección de “niños, bebés y carrocería”.
Gracias a la
insistencia del gran Hugo Sampere, muy amigo de su familia, decide volver a la
música a los dieciocho años. Es cuando forma el dúo “Vidal-Parissot” con el
prestigioso violinista Hermes Parissot del Cuarteto Vientre.
Más tarde,
también con Parissot, forma el trio “Vidal-Parissot-Ginebreda” contando
entonces con la valiosa colaboración del violoncelista Mateo Ginebreda del Cuarteto
Urquinaona.
Más tarde,
también con Parissot y Ginebreda forma el cuarteto
“Vidal-Parissot-Ginebreda-Muntaner” contando entonces con la valiosa
colaboración del viola Ricard Muntaner del Cuarteto Valencia Deprisa.
Más tarde,
también con Parissot, Ginebreda y Muntaner forma el quinteto
“Vidal-Parissot-Ginebreda-Muntaner y Saladrigas” contando entonces con la
valiosa colaboración del violinista Antonio Saladrigas del Cuarteto
Vellosín.
Es entonces
cuando el gran Hugo Sampere decide convencer a Vidal de que no siga con la música.
Pero Vidal ya
está lanzado y sigue aumentando enfermizamente su grupo hasta alcanzar la cifra
de 189 músicos en escena.
Esto termina
como tenía que acabar. Durante un macro-concierto celebrado en el Palacio de
los Deportes de Valencia bajo el nombre de “Vidal - Parissot - Ginebreda -
Muntaner - Saladrigas - Fonolleda - Ibáñez - Garisa - Picañé - Ventura de Aedos
- Mariné - Solchaga - Borrell - Marinot - Seguí - Peña - Martínez - Magranellas
- Furió - Piquet - Sandra - Lopátegui - Barceló...etc”, el escenario se hunde
provocando la muerte de veintidós de los componentes de la orquesta y de
algunas personas del público.
Este suceso
acaba con la carrera de Vidal como líder de grupo por lo que a partir de
entonces se ve obligado a ganarse la vida con la ayuda de unas peanas,un jersey
y algunas fotos de Molière.
No hay comentarios:
Publicar un comentario