sábado, 8 de noviembre de 2014

Filosofía para locos


UNA HISTORIA REAL

Un dia, Antonio Pérez tuvo una idea para una película. Era la historia de un niño que encuentra a un extraterrestre perdido en su jardín. El niño lo esconde en su casa y se hace amigo de él. Le enseña a hablar su idioma y cuando el extraterrestre aprende lo suficiente, le pide al niño que le suministre algunos cachivaches con los que se construirá un transmisor para contactar con sus congéneres en su planeta de origen. Mientras tanto, el FBI está interesado en capturar al extraterrestre para realizarle una serie de pruebas. El niño logra esquivar a los agentes del FBI y consigue que finalmente el extraterrestre sea rescatado por su nave.
Pérez tenía un amigo que se llamaba Steven Spielberg y le dijo si podía hacer una película con su idea. Spielberg se puso manos a la obra e hizo E.T. Durante la realización de la película, Pérez se implicó bastante dando un consejo aquí y otro allá, con lo que dificultó bastante la labor al director. Spielberg se vio obligado a repetir la mayor parte del film que ya tenía filmado.
Finalmente la película se estrenó y fue un gran éxito. Spielberg recibió unos 6000 euros por el trabajo. La película E.T., de Antonio Pérez, ha recaudado hasta ahora unos 1000 millones de euros, ha pasado a ser un clásico del cine y Pérez es aclamado como uno de los realizadores más importantes del siglo XX.
La historia, en este caso, me diréis, no fue así, por suerte. Sería una injusticia que el que tuvo una pequeña idea se lleve todos los laureles y el que verdaderamente ha realizado el trabajo no sea conocido por casi nadie.
Pero esto, aproximadamente, es lo que ocurre cuando un cantautor le da una pequeña melodía con cuatro acordes a un arreglista musical. La canción es del cantautor y él cobra todos los beneficios y recibe el reconocimiento del público, mientras que el músico que lo ha hecho posible cobra una cantidad irrisoria y quede totalmente en el anonimato.
Esto lo digo para que la próxima vez que sintáis la tentación de idolatrar a algún cantante, miréis antes antes quién ha hecho los arreglos…si es que lo pone en el disco.

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